Los milagros eucarísticos son interpretados como signos de la intervención divina en nuestra realidad cotidiana, reflejando la presencia de lo sagrado.
A lo largo de la historia, los teólogos han estudiado los milagros para profundizar en el misterio de la fe y su significado en la Eucaristía.
Estos milagros son esenciales para comprender la relación entre la fe y la Eucaristía, resaltando la importancia de este sacramento en la vida cristiana.