La vocación al sacerdocio es un llamado especial que implica dedicarse plenamente al servicio de la fe y la Iglesia.
Los sacerdotes y religiosos sirven a la comunidad a través de diversas actividades y enseñanzas que fortalecen la fe.
La misión de la Iglesia implica llevar el mensaje de amor y esperanza a cada rincón de la sociedad.